La actual situación de crisis genera una serie de condiciones sociales que potencialmente favorecerían la emergencia de conflictos de diversa índole en diferentes ámbitos sociales. El sector educativo es uno de ellos y es especialmente sensible en tanto que la población educativa es más diversa, congrega todas las nacionalidades presentes en Madrid.
En el ámbito educativo los conflictos entre pares iguales es muy común, se favorece a la formación de grupos por el sitio de origen, lo cual combinado puede generar que los jóvenes tiendan a confundir los conflictos que son de origen cultural o propios de la edad con aquellos que sean de origen racista.
El eje temático del proyecto apunta a generar un trabajo de sensibilización orientado a favorecer la interculturalidad y convivencia social. Fortaleciendo valores de tolerancia y respeto identificando actitudes claramente socializadoras.
Atendiendo a la inevitable convivencia de personas de diverso origen cultural, social y demográfico, se pretende realizar quince talleres en diversas entidades y centros educativos para promover actitudes de integración.
Se plantea una dinámica metodológica participativa a través de monitores formados específicamente para ésta finalidad. Se prevé la edición de material de apoyo educativo.
Objetivos que se pretenden alcanzar con el proyecto:
Contribuir a la mejora de la convivencia social mediante la sensibilización de los jóvenes beneficiarios, población inmigrante y autóctona, mejorando las herramientas personales de las que disponen para favorecer una mejor participación social e intercultural, atendiendo a la prevención del trato discriminatorio, racista y/o xenófobo, pretendiendo, de manera indirecta, disminuir las tasas de desarraigo y exclusión social. A través de la celebración de los talleres se pretende aumentar los conocimientos y habilidades sociales de la población, para que encuentren los cauces de participación e integración que la sociedad actual les proporciona de manera positiva y constructiva.
En definitiva, se trata de proporcionar elementos de juicio para afianzar y fortalecer actitudes favorables a la convivencia, entendiendo que el proceso de integración es dinámico, bidireccional y multidimensional entre los actores sociales.