15/07/2010 - POR H+D
La zona de los bosques secos interandinos es una de las más deprimidas del país y al mismo tiempo una de las más importantes y menos protegidas desde el punto de vista de la conservación de la biodiversidad. Detectados varios problemas como: la falta de iniciativas agropecuarias, la frágil capacidad técnica de los productores agrícolas y pecuarios, la dificultad de dar salida al mercados a los productos agrícolas o la reducida capacidad de los líderes locales para el desarrollo comunitario sostenible, conservación y gestión de recursos naturales. Todo ello impedía el aumento de ingresos económicos para una población rural sumida en el círculo vicioso “degradación ambiental – pobreza – mayor degradación”.
El proyecto busca impulsar procesos sostenibles para las comunidades rurales de los municipios de Tarija y Santa Cruz como el fomento de la ganadería camélida, la producción de frutales con control integrado de plagas para la conservación de los suelos, el manejo de ganado bovino semiestabulado, entre otros. De esta forma las organizaciones locales gestionan adecuadamente sus recursos naturales y en particular el agua y la biodiversidad además de generar excedentes económicos que les permiten elevar sus ingresos y mejorar su calidad de vida.