21 Mayo 2014

En el marco del Convenio Huellas de Paz 2011-2014 de Colombia, “Mejora de la estabilización social e integración de grupos afectados por el conflicto armado a través del acceso al agua potable, generación de ingresos y sostenibilidad ambiental en comunidades rurales para la construcción de paz”, se ha inaugurado el pasado 20 de mayo el acueducto veredal Liberia – Chimborazo en el municipio de Morales (Departamento de Cauca). Este acueducto se enmarca en la estrategia de la Fundación Humanismo y Democracia en Colombia, que desde el año 2011 está desarrollando el Convenio Huellas de Paz en colaboración con la Agencia Española de Cooperación Internacional para el Desarrollo (AECID) y la Federación Nacional de Cafeteros de Colombia.

El acto de inauguración en la comunidad consistió en un sencillo acto que contó con la presencia de la comunidad, la alcaldía de Morales, Manuel Gutiérrez Chaparro, como representante de H+D, y del Comité Departamental de Cafeteros del Cauca. La construcción de este acueducto a través de una red de 33 km y con una inversión de 433 millones de pesos (170.000€ aprox.) que permite el acceso de 370 familias a agua potable es parte de la estrategia ambiental que H+D lleva a cabo en Colombia, que pasa por la mejora de la calidad de vida de casi 3.000 familias de las comunidades rurales a través del acceso a agua potable y la instalación de infraestructura de saneamiento básico. Estas actuaciones de construcción de seis acueductos y la optimización de otro van acompañadas además con acciones de capacitación y acompañamiento a los habitantes de los municipios para asegurar el correcto uso de las infraestructuras construidas a través de la constitución y fortalecimiento de asociaciones de usuarios para la gestión del agua potable. Se busca, como objetivo último, que el acceso a agua potable permita disminuir la prevalencia de enfermedades ligadas al consumo de agua no apta para el consumo humano: fiebre, tifoidea, disentería, cólera y diarrea.

En el acto, el Gobernador del resguardo indígena de Chimborazo agradeció a las entidades por contribuir al desarrollo de la zona: “para nosotros es importante lo que están haciendo las entidades y nosotros como cabildo aportando nuestro granito de arena para que esto se haga realidad”. Por su parte, Manuel Gutiérrez, representante de H+D en Colombia, afirmó “el acceso a agua potable es importante porque es un derecho que tenemos todas las personas y nuestro trabajo es asegurar esos derechos, que por la razón que sea, han sido negados”.
La comunidad está formada en su mayoría pequeños productores agrícolas de origen mestizo, indígena y afrodescendiente en situación de gran vulnerabilidad ante los efectos de la pobreza y el conflicto armado. Las familias de pequeños productores campesinos se ven impedidas para ejercer sus derechos a una vida sana, en bienestar, con libertad y paz, debido a las condiciones de vida deficientes y de pobreza que se manifiestan en el aislamiento y falta de atención por parte de los agentes del Estado; en los bajos ingresos que no alcanzan para cubrir las necesidades básicas; en los débiles sistemas sociales que propician la resolución violenta de conflictos, la inseguridad y la discriminación de los grupos en situación débil, como las minorías étnicas, las mujeres y los jóvenes, así como en el bajo nivel educativo y la falta de oportunidades de desarrollo.