04 JULIO 2017
El martes 4 de julio, Su Majestad el Rey Felipe VI hizo entrega el XXIII premio Bartolomé de las Casas a la lideresa Asháninka Ruth Buendía. El galardón a su candidatura, a propuesta de la Fundación Humanismo y Democracia, reconoce su compromiso en la defensa de los derechos, el entendimiento y el respeto de los valores del pueblo indígena Asháninka de la selva Central del Perú.
Acompañando a la premiada estuvieron presentes la Ministra de Justicia y Derechos Humanos de Perú, María Soledad Pérez Tello, Dionisio García Carnero, Portavoz de la Comisión de Asuntos Iberoamericanos y Patrono de H+D, Maribel Alañón, Directora de H+D, y Salomé Hernández, delegada de H+D en Murcia.
Durante su discurso, el monarca recordó los vinculos históricos que unen a España y América e hizo incapié en el aporte de los pueblos indígenas como uno de los pilares esenciales de la Comunidad Iberoamericana de Naciones.
En referencia a la premiada destacó los logros conseguidos en la defensa de los derechos de las comunidades indígenas desde la perspectiva del Estado de Derecho que ampara a pueblos y personas.
Por su parte Ruth Buendía afirmó que los asháninkas aspiran a ser ciudadanos peruanos con plenos derechos y obligaciones, recordando a los presentes que “nadie es más peruano que nosotros”, y mostró su confianza de que el premio contribuya a hacer realidad esta meta. Además invitó al rey a visitar su comunidad para devolver el afecto y el cariño recibidos.
Tras una dura infancia marcada por una extrema violencia, su padre fue asesinado por militares y el resto de la familia secuestrada por Sendero Luminoso, Ruth Buendía ha conseguido cursar estudios de Derecho y Ciencias Políticas en la Universidad Peruana de los Andes y, desde 2005, es la presidenta de la Central Asháninka del Río Ene (CARE).
Esta organización representa a 17 comunidades nativas del río ENE y trabaja en la atención de sus demandas y en la defensa de sus derechos y territorios. Además, promueven actividades de fortalecimiento de sus instituciones, de formación y de liderazgo de sus jóvenes para lograr una plena integración y participación pública en el país.
Sin duda, su mayor éxito ha sido la paralización, mediante procedimientos no violentos y basados en la aplicación de la legislación, del Proyecto Paquitzapango.
Este mega proyecto hidroeléctrico peruano pretendía construir una gran presa en el Rio Ene que hubiera supuesto la inundación de los bosques donde se asientan, desde tiempos ancestrales, diez comunidades indígenas con una población superior a los 10.000 habitantes. Un hito que le supuso la concesión del prestigioso Goldman Environmental prize, declarándola “Heroína ambiental del planeta 2014”.
Además destacamos su lucha para conseguir, en estas comunidades, el acceso a servicios públicos como sanidad y educación, con profesores nativos bilingües, o la mejora de la producción y comercialización de los cultivos.
Para todo ello ha sido fundamental la campaña de visibilización de su etnia que, bajo el título de “Octubre Asháninka”, ha posibilitado que gran parte de la población peruana conozca, comprenda y se solidarice con la defensa de los derechos de su pueblo.
El Premio Bartolomé de las Casas se convoca desde 1991 por la Secretaría de Estado de Cooperación Internacional y para Iberoamérica del Ministerio de Asuntos Exteriores y Cooperación y la Casa de América. Lleva el nombre del fraile dominico y cronista Bartolomé de las Casas (1484-1566), símbolo de la defensa de los derechos indígenas. Tiene una dotación económica de cincuenta mil euros.
Para conocer más sobre esta cultura recomendamos el documental “Asháninkas, la selva o la vida” emitido por Televisión Española en su programa informe semanal:
http://www.rtve.es/alacarta/videos/informe-semanal/informe-semanal-ashaninkas-selva-vida/2669854/